77

El sentido del cielo,
  ¡cómo se parece al que tiende un arco!
Lo alto lo oprime hacia abajo,
  lo hundido lo levanta.
Disminuye lo que tiene demasiado,
  completa lo que no tiene bastante.
El sentido del cielo es
  amenguar lo que tiene demasiado,
  completar lo que no tiene bastante.

El sentido del hombre no es así:
Él amengua lo que no tiene bastante,
  para ofrendárselo a lo que tiene demasiado.

Pero, ¿quién está en disposición de, aquello de lo
  que tiene demasiado, ofrendárselo al mundo?
Sólo ése tiene entonces el sentido.

Así también el llamado:
Consigue y no retiene.
Si está el trabajo llevado a término,
  entonces no persiste en ello.
No desea mostrar su importancia a otros.



Es una defensa de la justicia. De la justicia del cielo. Y la opone a la injusticia del hombre. Es una defensa del orden divino.

Ya se ve la trampa al hablar de tipos de sentido: sentido del cielo, sentido del hombre. Si el sentido dice que el sentido que se nombra no es el sentido, ¿cómo podría echarse el sentido a nombrar tipos reales del sentido?

Es normal que termine el trozo declarando que eso del sentido puede alcanzarse y entonces ser sabio. Dice que, p.ej., el sabio consigue y no retiene: pero ¿no retiene el haber alcanzado el sentido? Pero eso lo afirma antes: que el sabio tiene el sentido. ¿Cómo tenerlo sin retenerlo?